Educación y Desempleo

Ya estamos en el mes de Febrero y el tiempo avanza con su inexorable marcha. Y como se esperaba en relación a la situación económica de nuestro país, la perspectiva no es nada halagüeña, pues ya se deja sentir la predicción anunciada para este año 2009. El periódico La Jornada publica un artículo, en el que hace mención de manera textual lo siguiente: “Más de 70 mil mexicanos con estudios profesionales y de bachillerato ingresaron a las filas del desempleo durante el último trimestre del año pasado, revelan las estadísticas de la más reciente Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE)”(1).

Esto nos lleva a pensar que es lo que pasa en el sector educativo del país, ya que al parecer las Universidades sólo están siendo fabricas de desempleados; y es que lo que en realidad ocurre, es que no existe una articulación real entre Gobierno, Sector Empresarial y el Sistema Educativo. Las políticas centralistas sobre la educación de los mexicanos, no alcanzan a recoger todo lo que en este sector se padece y en realidad se requiere; por otra parte las Universidades (al menos las públicas), no tienen verdaderos estudios de pertinencia y factibilidad de planes y programas de estudio, que permitan a los egresados poder integrarse de manera eficiente en el sector productivo, pues al parecer una vez que ha nacido un programa educativo es muy difícil que desaparezca debido más a intereses de grupos que a las necesidades reales que la sociedad demanda. Sin embargo los que están ganado terreno es el sector empresarial al imponer modelos educativos que permitan capacitar a las personas para que se puedan insertar al mercado laboral con las capacidades que el sector requiere. Sin embargo, ¿esa es la función de una Universidad?, ¿acaso no su principal función es el desarrollo intelectual y cultural de los individuos y las sociedades?

Si tenemos una sobre producción de profesionistas, ¿por qué el grueso de la población de nuestro país sigue pensando de manera anacrónica a las necesidades de los tiempos actuales? Y si el desarrollo de un país se basa en el nivel educativo de su población, acaso la sobreproducción de profesionistas en nuestro país, no debe ser un indicador del nivel educativo que tenemos los mexicanos y este se debería de reflejar en el desarrollo de nuestra sociedad. No, al parecer una cosa es la expedición de títulos universitarios y certificados de estudio de nivel bachillerato y otra cosa es la verdadera educación que todo individuo debe aspirar a tener. La educación que se nos da no es suficiente para que un individuo que egresa del bachillerato o la universidad pueda insertarse con éxito a la sociedad, pues al parecer sólo preparamos individuos como empleados, que es la máxima aspiración que se nos inculca “CONSEGUIR UN TRABAJO”; el problema surge cuando NO LO CONSEGUIMOS, nadie nos prepara para poder actuar en caso de no conseguir el tan anhelado trabajo. Siendo ahí donde se evidencia las deficiencias del sistema educativo del país.

Por lo que resulta necesario replantear la educación de nuestro pueblo y prepararlo realmente para que pueda hacer frente a las nuevas formas de convivencia (globalización) en todos los ámbitos; empezando por no segmentar la realidad y trabajar desde la integridad de las cosas con la complejidad que existe en cada una de ellas; privilegiando el desarrollo del pensamiento crítico y reflexivo y la capacidad de tomar decisiones sobre el transcurso de los acontecimientos, que permitan poder seguir adelante sin tener que detenernos ante la incertidumbre.

(1) Creció el desempleo entre profesionistas y personas con bachillerato a finales de 2008. 01/02/2009. http://www.jornada.unam.mx/2009/02/01/index.php?section=economia&article=020n1eco