En Nuestro hermoso México, estamos próximos a elecciones en el mes de Julio y justo es mencionar el papel que tienen los medios de comunicación en este proceso, principalmente los electrónicos y dentro de ellos la televisión. Para ser un país con enormes carencias, se gastan obscenas sumas de dinero en publicidad por parte de los partidos políticos; quienes tienen el negocio (monopolio) de la política; bueno eso de decir que tienen, más bien debería ser más preciso tienen secuestrada a la política del país; pues a pesar de que la constitución expresa que todos los ciudadanos Mexicanos tenemos el derecho de votar y ser votados, lo segundo sólo es posible a través de un partido político, que en nuestro México, resulta ser un negocio muy rentable, en el cual algunas familias tienen su modus vivendis.
Pero sin desviarnos del tema, el número de anuncios televisivos de los partidos políticos en contienda, que observamos hoy en día, son abrumadores por la excesiva cantidad de los mismos. Y mención aparte requiere los contenidos de los mismos, pues son casi una burla e insulto al pueblo de México; pues al parecer siguen creyendo en la formula de los espejitos de colores y en el impacto de las descalificaciones entre ellos; apostándole además a que el pueblo no tiene memoria, y de esa forma podemos ver a los mismos personajes brincando de un cargo de elección a otro, eso sin mencionar a los plurinominales, por los que nadie voto y en consecuencia a nadie se deben más que a sus padrinos que lo llevaron al poder.
Aquí es donde me pregunto hasta donde la materia de civismo está cumpliendo con su papel en la sociedad, o es tan sólo un instrumento de adoctrinamiento más. Pues no basta con inculcarle al ciudadano su deber de ir a votar, sino que se le debería de enseñar a reflexionar su voto y a analizar con sentido crítico las propuestas de quienes le piden el voto. Y para aquellos ciudadanos que participan en procesos electorales, los valores morales deberían de ser los principales estandartes con los que deberían de conducirse, sin esperar que sean un dechado de virtudes, pero si la ética, la honestidad y el compromiso social, deberían ser sus cartas de presentación, no porque ellos lo digan, sino porque las personas de su alrededor, se lo reconozcan.
Cuanto gastan en publicidad los partidos políticos en México y cuanto le cuesta a nuestro abrumado pueblo los políticos que tiene. Si se hiciera un estudio de la relación costo-beneficio, del desempeño de nuestros políticos y además se hicieran del conocimiento público, tendríamos el elemento más contundente para poder dar nuestro voto, pero con la certeza de que tomamos la mejor decisión.
Siempre se dice que el futuro está en las manos de las próximas generaciones; sin embargo que estamos haciendo para formar por el camino correcto a esas generaciones que son la esperanza de este país, para que lo saquen del letargo en el que por generaciones se ha encontrado sumido.
Por eso cuando tu hijo, tu sobrino o cualquier menor te pregunte por quien vas a votar, piensa bien lo que le vas a responder y cuáles son los argumentos que les vas a dar y sobre todo que te sirva para reflexionar tu respuesta.
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